El ruido es malo

El ruido es desagradable y molesta.

El ruido produce sufrimiento, angustia y ansiedad a los que lo padecen.

Deberíamos ser agradecidos a ciertos desconocidos,  pero  con agallas, que además del  sufrimiento y la tortura soportada,  al  interponer un pleito contencioso, -perderlo-, ir luego al  Supremo, -perderlo-,  ir  al Constitucional, -perderlo también-  y tras el calvario de recursos, reveses, y costos,  ganaron finalmente un  pleito, nada menos que  ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. De ello, nos beneficiamos todos.

Lo  lograron, -y que sirva de público homenaje a  la Sra. López,  y su familia-.

Esta señora,  cerca de su  casa donde vivía,  se instaló una planta de depuración de aguas que le producía ruidos y olores.  La señora,  lógicamente se quejó y demandó al Estado ante todos esos tribunales españoles antedichos,  de lo mal que lo pasaba su familia en  casa. Todos la rechazaron,  por una u otra causa.  Los tribunales españoles se fueron por la tangente y nadie la atendió. Pero ella se empeñó.  Gracias a su perseverancia, en Europa le dieron la razón,  y se estableció una doctrina que nos ha servido de guía a caminantes, y letra impresa para manuales y tratados. Dice su triunfo, resumidamente lo siguiente:

Toda persona tiene derecho al respeto de su vida privada y familiar.

Los atentados al medio ambiente, afectan al bienestar de una persona,  si se le priva del disfrute de,  y,  en su domicilio (aunque no corra grave peligro su salud).

El  Estado tiene obligación de  mantener el justo equilibrio entre el bienestar económico de la ciudad,  y el disfrute de un particular  y respeto de su vida privada en su domicilio.

La Sra. López y su familia,  vivieron  durante varios años en una condiciones difíciles, (sin llegar a ser degradante) con depreciación de su casa, ruidos, olores padeciendo angustia y ansiedad, deteriorándose el estado de salud de la familia, produciéndose un daño moral innegable.

Finalmente condenaron al Estado Español a pagar una indemnización.

RAZONES: El ruido es un sonido desagradable,  inarticulado,   que molesta. Produce efectos no deseados para el que lo padece y es nefasto para la salud y el bienestar físico.  Es contaminante, pues al tener una mezcla de frecuencias diferentes, produce una sensación molesta o incómoda, sea quien sea quien lo produzca,  y origina  daños a las personas. El ruido es algo que interfiere a la persona, y le ocasiona  efectos fisiológicos o psicológicos negativos.

Por lo tanto el RUIDO ES MALO. Y es –afortunadamente-  medible objetivamente. Y como es medible, pues se puede acreditar, y si se puede probar,  se puede  reclamar a nuestros tribunales que lo impidan.