Las campanas de Caniles

Cuando el Obispo de Guadix, llegó a una pedanía aislada de Caniles, en plena Sierra de Baza, allá por el siglo XIX, fue a recibirlo el Alcalde. El eclesiástico, nada más llegar,   advirtió que no sonaron las campanas, y temiendo falta de ensayos del coro o del campanero del pueblo, su Reverendísima, le preguntó al Alcalde, el por qué no sonaron las  campanas al llegar. El Alcalde, le contestó misteriosamente que “por muchas razones”, pero que se las explicaría al llegar  al Ayuntamiento. Intrigado el Obispo, no hicieron más que llegar y volvió a preguntar: ¿Dígame, por qué no han sonado las campanas? A lo que el alcalde respondió: Excelentísima, es que en este pueblo no hay campanas. Pues entonces no hay  ensayos, no hay coro, el campanario está hueco, no hay  campanero, y estas,  supongo,  serán las otras razones, -le contestó el Obispo-.

               Hay también “muchas otras razones”,  que explican que se oiga ruido entre las casas. Para comprobar esas deficiencias de  aislamiento en las  paredes medianeras, -nivel inferior a 45 dBA-, se pueden  realizar,  a través de complejos ensayos e instrumental homologado, sonómetro acústico Rion,  difusores de  sonidos, rosa,etc, mediciones  del sonido medioambiente, dodecaedro,  amplificador etc. Que por cierto, nuestra empresa lo hace. Esas serán otras  razones.

             Pero antes de realizar el ensayo de sonido que ya se ha expuesto, siempre procedemos  a la realización de una cata de comprobación en la pared ensayada,  -de separación entre viviendas-, y se mide el espesor del elemento vertical,  dando en muchísimas ocasiones (99%) como resultado 11 cm (incluido el revestimiento y la pintura), y siempre se observa que está construido mediante ladrillo cerámico hueco o perforado.

Si además, usted estudia el  PROYECTO, le auguramos que expresará  en la mayoría de las veces que la tabiquería es de 2pie de ladrillo macizo revestido a dos caras con yeso, cuyo aislamiento se estipula en 46 dB (>45 dB).

            Pero en las Mediciones y Presupuesto se proyectan las siguientes partidas para la ejecución de la separación entre viviendas: Ladrillo perforado de 25x12x7 cm. de 2 pie de espesor en interior, guarnecido de yeso en paramentos verticales de 15 mm. de espesor.

               La suma de ambas partidas para constituir la tabiquería de separación entre viviendas supone 3 cm. de guarnecido y enlucido de yeso más 12 cm. de fábrica de ladrillo perforado, lo que equivale a 15 cm. en total, lo que difiere de la realidad, ya que existen en la actualidad 11 cm. en total,  menos de 15 mm,  totales de ladrillo, guarnecido y enlucido.

            Todo lo expuesto, certifica la falta de correspondencia entre lo proyectado y lo ejecutado, -la gran mentira-, además de la existencia de incongruencias en el proyecto por definir la fábrica de ladrillo perforado y macizo indistintamente. Pero lo más sorprendente es que en todos los proyectos que hemos comprobado que “dice” ladrillo macizo, no hay un solo fabricante o  proveedor en la zona, ni en las cercanías que lo suministre, y ni por el forro aparece un ladrillo macizo en la edificación. Pues bien, como dijo el Alcalde: Déjense de ensayos,  si oye ruido es porque el ladrillo no es macizo sino hueco.

               La solución sería comprar una campana, o en nuestro caso,  demoler  los paramentos verticales de separación entre viviendas, poner  ladrillo macizo o perforado de 12 cm. de espesor pero revestido  con guarnecido y enlucido de yeso de 15 mm. en cada cara. Entonces estará tan aislado como en Caniles.

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