Desnivelación de la piscina, el nivel del agua no coincide con el del gresite

Desnivelación de la piscina por asiento del vaso.

Cuando se construye una piscina, con el fin de evitar que la horizontalidad del gresite  pueda verse  afectada,  se parte desde arriba; por esa razón,  se delinea  desde el centro superior de la pared, una escuadra y nivel, para que  sirva de referencia para dibujar  el eje horizontal.

Seguidamente comienza la colocación del gresite, desde la parte superior de una pared vertical. Desde allí, y completamente horizontal, se colocan adosados los paneles de gresite con cemento cola. Nunca  se empieza por los extremos de la pared, sino a partir de ese cruce de ejes en el centro de esa pared, y por la parte superior.

Una vez revestidas las paredes de gresite, se deja  para el final, el fondo, donde se pueden colocar a medida, la colocación de las medias cañas o curvas de  gresite, donde no  se notan los fallos de continuidad, cortando  o recortándose las  piezas o cuñas, para unir los paramentos verticales con del fondo.

Cuando se llene la piscina, el nivel de agua o línea de flotación, marcará la horizontalidad, y ésta coincidirá con las líneas rectas horizontales del gresite, pues la horizontalidad ha comenzado desde la parte superior de la piscina. Las irregularidades o diferencias de cota en el suelo, se  corregirán como ha quedado dicho, con medias cañas, curvas o cuñas de gresite, insertándolas a medida.

Esta forma de construcción es básica y universal. El sentido común, ni nadie, explicaría que la horizontalidad se inicie o venga desde el fondo de la piscina, pues los fondos de las piscinas, tanto para repararlas, como para evacuar el agua cuando esté sucia, o renovar el agua, están siempre inclinados y no son horizontales, precisamente para que no se estanque el agua, coincidiendo la cazoleta de salida del agua,  en la parte más profunda. Se trate de piscinas comunitarias o individuales. Todo esto es puro sentido común.

¿Por qué exponemos con insistencia la forma de colocación del gresite? Porque cuando hay una basculación del vaso de la piscina por consecuencia de un asiento diferencial, -algo bastante grave y que puede terminar con grietas en la piscina-, el técnico o arquitecto director de la ejecución, puede caer en la tentación -para desmarcarse- de decir que la desnivelación es algo  meramente estético. O que el operario de turno, colocó “ya inclinado el gresite” (¿….?) .

No es cierto, no es un error de inicio, ni defecto estético, sino que la piscina perdió  la horizontalidad, por una basculación real del vaso, que originariamente estaba horizontal, pero que asentó  diferencialmente.

Es evidente, que  existe un daño en la piscina –la falta de horizontalidad- por la conducta descuidada y  culposa del técnico o arquitecto que ha dirigido la obra, pues no se interesó en ver el terreno, y posteriormente el vaso basculó, osciló y perdió el nivel,  por un asentamiento diferencial. Puede incluso, que  aparezcan fisuras o grietas, y el vaso se rompa, por motivo de esa basculación, o por una cavidad, u oquedad severa en el subsuelo de apoyo, o por aporte masivo de agua de agua subterránea modificándose más la resistencia del terreno.

Por lo tanto, como la excusa de “poner de inicio del gresite no horizontal”,  ya lo hemos oído lamentablemente en muchas ocasiones, incluso por peritos, o  arquitectos que han informado  en  juicios,  y si a usted le han dado esa torpe  explicación, no haga caso, la responsabilidad es del técnico o arquitecto, que dirigió la ejecución de la obra, por falta de un examen minucioso del subsuelo de la piscina, -que no debería estar lo suficientemente compactado-, o inadecuado a las características de la cimentación de ésta. Y no un mero defecto estético.

Vea el siguiente enlace para consultar otro artículo publicado y referido a las perdidas de agua de piscinas 

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